Mar Menuda – 17 Julio 2018
Me llena de orgullo y satisfacción tener el honor de haber sido elegido para realizar la crónica de la salida a Tosa de Mar el día 17 de julio del 2018, en la zona conocida como Mar Menuda. De todas formas, como dijo el Miguelito cazador de elefantes, estoy muy arrepentido y prometo que no lo haré más.
Vamos por faena. Tuvimos un día fantástico, nos acompaño el día, el mar y como no, los amigos.
Quedamos en el club L´Amfora a las 9:30, bueno teniendo en cuenta la diferencia horaria entre Tossa y Barcelona los de esta última llegaron a las 10 (básicamente como siempre).
Tuvimos un fichaje nuevo, Juan, amigo de Herminio, todo un fenómeno arreglando manómetros, os lo recomiendo (precio de amigo).
Después de cambiarnos nos dirigimos a la playa y allí estaba ella, limpia, tranquila, calentita… vamos preciosa! Para mentes enfermas, hablo del agua. Nos metimos enseguida, enseguida que acabamos la sesión de fotos, foto aquí, foto allá.
Nada más empezar la inmersión tuvimos un gran susto. Iba Oscar con su pareja este… cómo se llama? Ese que tiene el pelo raro y a mí me da tanta envidia, si hombre, que tiene un Audi rojo nuevo, bueno nuevo, nuevo de hace 20 años. Sí! Álvaro, pues resulta que de golpe y porrazo una morena de unos 20 cm o más, se abalanza sobre ellos, gracias a su pericia y sangre fría salieron indemnes de lo que pudo haber sido una sangría. Todo quedó en un susto del carajo. El resto de la inmersión fue muy plácida, vimos langostas, escórporas, doradas, dentones, sargos impresionantes, pulpos y claro está morenas (una de ellas la asesina).
Cuando digo vimos me olvido de alguien, mi amigo Fabra, no vio una leche, se pasó la inmersión con las gafas enteladas, gracias a su hijo que le hizo de lazarillo.
Finalizada la inmersión llegó el gran momento de la comida y la bebida, claro. Fuimos a un restaurante que nos recomendó Herminio. Allí llevamos al pobre camarero al límite, leyó la carta si éramos 11, pues 11 veces primer plato, 11 veces segundo plato y 11 veces postre. Le pedimos disculpas por ser tan lerdos y acabamos comiendo bien. Durante la comida hablamos de todo, de bomberos, de bomberos ah, sí! y también de bomberos y eso que no estaba el Alcaraz! Al cuál dicho sea de paso echamos en falta.
Luego Jose hizo la típica broma “quién quiere hacer la crónica??” y allí se acabó la jornada y salimos todos en estampida. Os juro que así lo viví y así lo cuento, palabra de Negro.
PD: ahora en serio quiero aprovechar la ocasión para agradecer una vez más a Jose y Herminio el trabajo que hacen, todos somos conscientes que sin ellos esto no sería posible.
Gracias!!
Autor: Pere Hernaiz